Durante los meses de confinamiento he tenido tiempo de practicar la técnica del bordado. Es algo que aprendí hace un par de años gracias a los talleres de La Retalera, donde hicimos esta Frida tan bonita con La Sra. O.

Disfruté muchísimo este taller y descubrí un mundo que me encanta. Después hice un par de cursos más y me regalaron el libro Mi cuaderno de bordado. La guía imprescindible de bordado tradicional. ¡Quería bordarlo todo!

Me parece una técnica muy versátil. Puedes dar un toque decorativo a prendas de ropa, a cualquier tela pero también a otros soportes, como el papel. Incluso puedes dejar el trabajo terminado en el bastidor, a modo de marco, y colgarlo en la pared, como hice con Frida y como he hecho con Totoro. Bordar es como pintar con hilo, ¿a que suena muy bonito?

Todavía me queda mucho por aprender, por eso voy haciendo proyectos sencillos, como este Totoro bordado. Tenía la idea en la cabeza desde hace tiempo. Totoro es el personaje de la película Mi vecino Totoro, de Hayao Miyazaki, una de las películas más emblemáticas de Studio Ghibli. Y si no lo conocéis, por favor, ¡dejad de leer esto y salid corriendo a verla! Es broma, terminad de leer el post, ¡pero luego id a buscar esta peli!

Quería que fuese un dibujo sencillo, nada de rellenarlo ni darle color. La tela elegida creo que le va muy bien. Tiene un estilo un poco asiático, da textura al dibujo y así podía hacerlo sin rellenarlo todo como si estuviese pintado.

Lo que hice fue ir alternando la cantidad de hebras de hilo que utilicé. En algunas zonas utilicé hebra doble, o incluso tripe, para que fuesen las zonas de trazado más grueso, y una sola hebra para las zonas donde quería que los detalles fuesen más finos. Es una puntada simple todo el tiempo. Realmente es muy sencillo, una buena forma de tomar contacto con esta técnica.

Recordad que podéis comprar material para bordar en la sección de Mercería de la web.